José Osete es uno de los muchos aficionados fieles al club, pero desde hace tres años una fuerte enfermedad en la vista le ha privado de su visión. A pesar de ver sombras, no falla a una cita con el club cuando juega en casa.
José cuenta que en las previas suele prepararse alrededor de unos 45 minutos antes, y cuando llega a la puerta, le espera Carlos Bernabé voluntario del club, o como Jose lo llama, su vecino.
A la hora de seguir los partidos, gracias al apoyo de Carlos, le va haciendo preguntas sobre lo que va ocurriendo durante el encuentro. Eso sí, el mismo asegura que fuera de casa es “cobarde” ya que no le gusta “encender la radio” sobre como va el partido.
El propio Jose comenta que su sentimiento por el club viene desde los diez años, cuando iba a la calle Aurora a sacar el carnet de socio mes a mes tanto de sus padres como el suyo.
Su amor por el club no cambia y él mismo asegura que “ser del Murcia tiene mérito” tras todos los momentos malos vividos con las situaciones del club. A pesar de ellos, uno de sus mejores recuerdos asegura que fue la victoria del Real Murcia 1-6 en La Romareda. El propio José comenta que estaba realizando el servicio militar, y que el club no conseguía ganar. Entonces le preguntó a un hombre que estaba con la radio sobre cómo quedó el partido, y cuando le contestó quedó sorprendido, y él asegura “eché a correr de alegría al escuchar el resultado”.
Tanto en el fútbol como en la vida hay momentos de dificultad, pero personas como Jose demuestran que nunca hay que perder el valor y el espíritu por aquello que te apasiona.
por